Among the various artists sharing their talents at this month’s summer camp “Traveling around the World” (organized by Cine Club Primera Toma, A.C.), the multi-faceted Randy Vega is assisting campers in the area of voice and song. Earlier this year, RockyPoint360’s MoKa Hammeken had a chance to sit down with Randy and learn more about his extensive background.  [English excerpts below]

Una cerveza con el artista consagrado de Peñasco

Por MoKa Hammeken

Todo Puerto Peñasco sabe de quién hablo, es tan conocido como singular. No requiere de mucha presentación ¿o sí?

Debo confesar que cuando me dijeron que era el “artista consagrado” de Peñasco la verdad me imaginé que alguien que se paseaba por el mundo con ese calificativo sería alguien por demás inaccesible y antipático. Sin embargo, después, durante mi viaje a Álamos, al FAOT, descubrí lo equivocada que estaba.

De primera impresión es muy serio, pero ya entrado en confianza es todo un personaje, simpatiquísimo cuando hay que serlo y cuando hay que hablar en serio lo hace. Tiene una forma muy peculiar de ver al arte, a las personas y a sí mismo.

Ahora ya no está aquí, se fue a Ensenada a terminar su carrera trabajando en su tesis de Químico Biólogo clínico (o en caso de poderse, nos da la sorpresa y se vuelve Psicólogo). Entonces al ver su cuenta regresiva en facebook decidimos tomarnos unas cervezas, conversar un poco y hacer una entrevista. Su última aparición en público que fue en mayo, en el Tequila Fest 2013.

-Una de las razones por las que elegí Ensenada (aparte de que el clima es fabuloso y yo soy un chico de playa totalmente), es que estuve también buscando con un amigo y allá encontré una escuela de artes muy muy buena, entonces, también influyó en mi decisión de irme. Ocurre que esto de actuar yo ya lo veo como algo más profesional y muy definido en mi. Pienso prepararme todo lo que pueda, y quiero tomar eso como un compromiso bien hecho. Yo sé que hay actores natos y con mucho talento, pero hay un punto en el que ya no es suficiente; se necesitan “tablas” para sacarle provecho a eso, porque se nota. Por otro lado, como te platicaba, está mi carrera, que la tengo y quiero terminar pues tengo que ser realista y tener los pies en la tierra. Quién sabe si en algún momento de mi vida voy a tener que echar mano de ese recurso-

-Supongo que después te gustaría irte a la Ciudad de México, con la gran actividad teatral que hay por allá-

-Ya probé en alguna ocasión la ciudad de México- me contestó un poco nostálgico- y viví un poco el ajetreo de cómo esto a un nivel metrópolis: tan vigoroso. Entonces sí, estoy pensando en llegar allá de nuevo, con más armas, porque seamos sinceros, aún cuando hay talento en todos lados la meca del teatro en México, es el DF, ya de ahí te mueves para donde quieras. Ya después de todas las experiencias, también ya traigo otra forma de ver las cosas; que ocurran a su ritmo, sin presionarlas mucho pero tampoco darlas por sentado.

– Supongo fue ahí donde conociste a Lolita Cortez- Recordé que en otra ocasión me había hecho un comentario a cerca de ella

-Jajaja, no. A Lolita Cortez la conozco en un casting de la Academia Bicentenario en el 2010. Yo fui a Tijuana el 16 de agosto donde me tocó dormir horrible, llegar una noche antes y en el piso con ese clima tan extraño de Tijuana. Luego los de TV Azteca te levantaban una hora antes para que estuvieras fresco para cuando pasara la cámara y saludaras todo entusiasmado como si acabaras de llegar, ¿sí has visto las tomas de la gente emocionada brincando cuando comienza el programa? Bueno, pues en el 2010 ahí andaba yo. Entonces pasamos el registro y había varios foros y en uno de ellos vi que estaba Lola y yo dije “Ay no por favor, que no me toque con ella ¡que miedo!” y ¡Zaz! Que paso y ahí estaba ella; casi me muero.

Nos reímos, es cierto que Lolita Cortez puede ser algo aterradora, incluso en muchos de sus personajes en el teatro.

-Mira la verdad es que yo iba con toda la intención de hacerme famoso a como diera lugar, entonces me aguanté; me tragué los miedos y las incomodidades y ¡ni modo! Ya estaba yo ahí. En este caso iba a apostar todo en cantar (tal vez ya estando en el medio, después se diera la ocasión de actuar) – Se detiene un segundo, le da un trago a su cerveza y sonríe- Igual y está mal que lo diga yo así pero he tenido la fortuna de desempeñarme en varias artes y lo he hecho bien, aunque hay algo peligroso en eso, pues como dicen: “no a todos los santos les puedes poner una vela” y eso se aprende con los golpes de la vida, por eso quiero aprovechar todos mis talentos artísticos pero en uno solo, que es la actuación. Es tan versátil que te permite hacer de todo; cantar, modelar, pintar, escribir, maquillar. Te transforma.

Bueno- continúa el relato- después de conocer a Lola en la audición, me fui a México a seguir con eso, pasé todos los filtros y al final, ya no entré a la academia por una u otra razón (un problemilla ahí con un argentino)- y me guiña el ojo-
En una de esas tantas rondas que estaba yo cantando Lola fue la que me dijo “tú no eres cantante” y que me calla, se me hizo la boca así chiquita, “tu eres un muchacho que puede cantar y que puede hacer teatro ¿por qué no te vas a teatro?” y yo pensé que esas eran las palabras bonitas para decirme “gracias por participar y ya vete”.. Pero entonces curiosamente fue ella quien me dio la pulsera para pasar a la siguiente fase.

Desde aquella vez, ella se quedó con la hoja de registro con todos mis datos, correos y fotos, y al final, cuando me dieron mi salida, me dijo que me iba a hablar porque luego ocupaba chavos que auxiliaran en las obras de teatro. Obvio que me fui con ella (brincando de la emoción) primero de “metichito” aprendiendo y ayudando en un poco de todo: maquillaje, vestuario, iluminación, montaje, escenografía, etcétera. Ella es de las que si, después de un rato, si ve garra y talento en ti, y le importas pues poco a poco ya te va jalando y metiendo para más la actuación.

A mi me fascinó la experiencia del teatro musical, y me encantaría estudiar yo lo suficiente como para crear personajes para este tipo de representaciones, porque durante ese tiempo no solo vi, sino que lo viví y se requiere de mucha preparación para eso.

Calla un poco y reflexiona en lo que un músico está acomodando sus instrumentos para en breve amenizar la tarde con sus covers.

-Por eso Ensenada es un lugar idóneo para mi,- continúa y me dirige una mirada un poco triste pero tranquila- porque ahí encontré un lugar donde puedo terminar mi carrera Químico biólogo clínico, porque la verdad es que el artista no nada más vive del aplauso… Ahora que lo recuerdo yo siempre he vivido del aplauso – y se ríe a carcajadas- O bueno no, ya recuerdo, solo una vez, cuando presente aquí mi obra gané un poco de dinero, pero lo usé en para ir al casting de “La Voz México”-

Me entró la duda ¿qué no había dicho la Academia? – El de Tijuana ¿no?- pregunté, pues vaya a creer que no le estaba prestando yo atención.

-No amiga- me contesta muy simpático- la Voz México, real. El de Tijuana fue de la Academia. Si te digo que yo iba con la ambición al tope, yo iba con todo y yo toqué puertas en todos lados-

Y por andar de picaflor aquí y allá pues aprendí mi lección. Me quedé como el perro de las dos tortas porque pues, Lola se enteró y … digamos que Televisa y TV Azteca no se llevan muy bien que digamos.- y me dirige una mirada y sonrisa de complicidad.-

-Los errores son lecciones y ni modo, por andar de avorazado… Por eso también te decía lo de los santos y las velas…Aún así me quedé en la Ciudad de México algunos meses más antes de regresarme a Sonora. A ver si salía un casting por ahí, alguna obra por allá, algún trabajo menor, a ver si un poco de modelaje-

En cuanto la conversación se detuvo un instante la mesera apareció con unos palitos de pan algo de salsa marinara y unos limones. Nos quedamos en silencio un rato.

Modelaje. Según yo ese era su principal inclinación, pues veía las fotos en el facebook de diferentes photoshoots y cuando fuimos al FAOT, el último día tuvo una sesión bastante interesante con Getzemaní Lozano (fotógrafo).

-Yo pensé que tu fuerte era el modelaje, pues tenía entendido que eres gran amigo de Reyna Leyva y empezaron juntos.

-Te digo que todo me gusta y a veces le hago más a esto o más a lo otro dependiendo de qué sale o la oportunidad que se me presente, pero si, todo empezó con Reyna y. Yo desde la secundaria me encantaba verla, me fascinaba su físico, su cara se me hacía una chica muy diferente y yo siempre le andaba diciendo “oye tu deberías ser modelo, en serio, ser modelo es lo tuyo”. Entonces por esas fechas mis papás me regalaron una cámara (que yo anhelaba una cámara), una cybershot que nada más sacaba 15 fotos y teníamos que pensar muy bien esas quince fotos, porque ni dinero tenía para comprarle una tarjeta con más más memoria. Entonces nos maquillábamos y nos íbamos buscando locaciones improvisadas para nuestras sesiones y yo le decía a Reyna que sólo le iba a hacer quince fotos entonces tenía que echarle muchas ganas y preocuparse de darme una buena foto. Y así empezamos jugando, eramos unos peques teníamos 16 y 17 años (ella es de marzo y yo soy de julio) y así nos fuimos a la aventura una vez, ella como modelo y yo como fotógrafo, aunque llegamos tarde porque no teníamos para el avión y nos fuimos en camión; se nos hizo fácil la verdad. Pero ahí nos dimos a conocer.

Reyna pues ya viste, ya anda por todos lados en el mundo, y a mi me empezaron a contactar algunos fotógrafos por los autorretratos que yo me hacía. Eso me encantó. Mientras estuve en el D.F. me llamaron varios y yo feliz de la vida pero sé perfectamente cuales son las limitaciones de mi tipo y de mi físico, de que sólo sirven para cierto tipo de fotografíar. No me malentiendas, digo, me encanta posar, me encanta la cámara y, o sea, a quién no le volvería loco de felicidad andar viajando por todos lados, pero yo sé que yo no voy por ahí, no tengo ni el físico, ni la estatura, ni las ganas. Le entré a eso nada más por casualidad pero esa no es mi verdadera aspiración en la vida. A mi lo que me gusta es actuar, y es por eso por lo que, para mi, vale la pena luchar y dejar muchas cosas de lado para probar… Como mi carrera. Lo de químico Biólogo clínico la verdad es que le había puesto una pausa por seguir en esto de la “artisteada”, la dejé de lado en el 2010 cuando me fui a la ciudad de México y ahora lo retomaré, más maduro, más consciente de lo que quiero y de que hay que cerrar ciclos.

Esta vida me ha dado muchas vueltas, pero casi todo sobre lo mismo entonces tengo recursos para salir adelante, y en lo que retomo la carrera universitaria tengo muchas opciones de donde escoger, gracias a Dios y ahora allá en Ensenada creo y espero que todo se va a dar muy bien, es un lugar con mucho movimiento y con mar… Me encanta el mar…

-Randy, tengo una duda que me da vueltas en el cerebro-

A ver, dime.- me incita curioso

¿Por qué estudiar Químico biólogo clínico? Jamás me hubiera imaginado que tú, siendo tan creativo, te buscaras algo un poco más estructurado-

– Bueno, eso es simple: porque, cuando yo tenía que escoger una carrera, yo no conocía de más opciones. Era de las cosas que había la que más me llamaba la atención… No sé que hubiera sido de mi si hubiera sabido yo de todas las carreras artísticas que había, pero probablemente no tendría yo esta segunda opción, que ahora veo como algo muy concreto… ¡Y era bueno en química, ehee!

Seguimos hablando de tantas y tan variadas cosas, y se dejó venir otra ronda de cervezas por qué no. Hace tiempo que Randy dejó de ser un personaje más, saludándonos siempre con mucho cariño. Ese viaje a Álamos nos enseñó mucho tanto de unos como de otros; mas que nada que los artistas sin poses son como niños jugando, haciendo lo que les gusta hacer.

A drink with Peñasco’s consummate artist: Randy Vega

By MoKa Hammeken

All of Puerto Peñasco knows of whom I speak, he is as well-known as he is unique…he doesn’t require much presentation, or does he? He is Randy Vega.

I should confess when I was told he was the “consummate artist” of Peñasco I honestly imagined that someone who went around with such a title would be inaccessible and somewhat unfriendly. Yet, following our [February] trip to the Alfonso Ortiz Tirado Festival (FAOT) in Alamos, Sonora, I learned just how wrong I was.

Rather serious upon first impression, as the trust builds he is really quite a character, extremely nice when he has to be and serious when it’s called for. He has a peculiar form of viewing art, people, and himself. Randy’s last performance in Puerto Peñasco was at Tequila Fest, 2013, and currently he is pursuing a degree as a Chemical Biologist in Ensenada.

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“As it turns out, acting I now see as something more professional and very defined within myself. I plan to prepare myself as much as I can, and I want to take this on as a well-defined commitment,” he explains in discussing one part of his talented background.

“I tried living in Mexico City at one time,” he relates with a bit of nostalgia, “and I lived a bit of the craziness of the metropolis: so vigorous. I’m thinking about going back, with more skills, because let’s be honest, though there is plenty of talent everywhere the theater mecca in Mexico is Mexico City (DF).”

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In the past, Randy has tried out for (and passed through various phases of) singing competitions here in Mexico including La Academia and La Voz Mexico (similar to American Idol and The Voice).  Though he did not end up competing on the televised shows, through a relationship built with one of the judges he was able to experience life behind the scenes by learning and helping with a bit of everything: makeup, wardrobe, lighting, sets, scenography, etc.

Randy has also dabbled in the world of modeling, launching from an initial interest in photographing friend and now global modal Reyna Leyva.

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“I loved watching her [Leyva] ever since we were in secondary school; her physique fascinated me and her face made her a very different girl. I was always saying ‘hey, you should be a model, seriously, modeling is your thing.’ At that time I had a cybershot camera that only took 15 pictures, because I didn’t even have the money to buy more memory for it. We would get made up and look for improvised locations for our photo sessions…that’s how we started, playing, we were around 16 and 17….and Reyna, well you’ve seen, she’s now traveling around the world and I started to get contacted by photographers for the self-portraits I had done. I loved it! I entered [modeling] more due to circumstance, but that is not my true life’s inspiration. What I like to do is act, and that is why for me the struggle is worth it, while leaving many other things to the side so I can try…”, he concludes.

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We continued talking about many diverse things while another round of drinks came by. Randy had ceased to be just another character, and we now greet each other warmly. That [February 2013] trip to Alamos taught us quite a bit: more than anything that artists without pretense are like children playing, just doing what they like to do.